Añadido: 4 años hace
Hace unos meses que su novia ha descubierto el alucinante planeta de los juegos para videoconsolas y desde ese momento pasa olímpicamente de él. Día tras día se sienta en el sofá hastiado mientras que ve a su muchacha jugar, menos mal que tiene la fortuna de tener una suegra comprensiva, que procuró charlar con su hija a fin de que no lo desatendiera tanto, mas viendo que no hizo ningún caso, aprovechó una tarde en la que jugaba sin enterarse de nada de lo que ocurría a su alrededor y le obsequió al pobre muchacho una coito intensísimo que probablemente el muchacho recordará para el resto de sus días.