Añadido: 4 años hace
Él llevaba toda la mañana trabajando y todavía le quedaba mucho curro por delante, mientras su novia Apolonia Lapiedra estaba tumbada en el sofá, vestida solamente con un conjunto de ropa interior colorado muy sensual y caliente expectante de tener la polla de su muchacho dentro. Tras mirarlo múltiples veces con cara de deseo, el hombre decidió tomarse un pequeño reposo mas no exactamente para tomar un café o bien tomar algo de aire en la terraza, el reposo que decidió tomarse fue solamente para petar la boca y el coño rasurado de Apolonia hasta dejárselo muy mojado.