Añadido: 4 años hace
Estos cabrones saben de más como lograr un buen polvo. Primero fingen que ayudan a <strong>sus hijas a estudiar</strong> y cuando acaban les afirman que deben pagárselo entregándoles sus coños. Las pobres adolescentes no saben que hacer, mas al final ceden y comienzan a comerles los rabos. Los tíos están tan cachondos que no precisan más que un segundo a fin de que se les ponga bien dura. Entonces las ponen a 4 patas en el sofá y les dan fuertes pollazos por detrás. Las tías no paran de gozar del polvazo que reiben y chillan como unas locas toda vez que las penetran.