Añadido: 4 años hace
<strong>Hacer dogging con su marido</strong> se ha transformado en una de las grandes aficiones de este pedazo de puta a la que le chifla que un montón de ignotos vengan a clavarle el rabo. Su esposo es un cornudo que lo permite todo por el hecho de que a él asimismo le agrada ver de qué manera su mujer es tan zorra que goza de otras pollas delante de él. Poquito a poco cuando paran el vehículo van viniendo cada vez más y más hombres a follársela ahí en la mitad de la calle y en un rato acaba súper llena de leche por todas y cada una de las corridas que le sueltan encima.