Añadido: 4 años hace
Esta tía estaba aguardando impaciente que llegasen las vacaciones veraniegas para compartirlas con su marido en una isla paradisiaca de esas donde hay tíos cuadradísimos que tienen pollas enormes. La muy guarra, cuando su marido se distrae para quedarse echándose una siesta en la habitación del hotel, <strong>se folla a un negrazo</strong> que la incrusta sin parar. El tío tiene la mayor polla que la zorrita haya visto en su vida y si bien no le entra en la boca el muy cabrón se encarga de que a base de empujar y empujar no haya ni un pedazo que no se le llegue a meter en el coño.