Añadido: 4 años hace
Me desperté con una resaca brutal tras haberme pasado toda la noche de celebración con mis amigos, con lo que velozmente fui al botiquín a tomarme un calmante, mas andaba tan dormido que involuntariamente me tomé una viagra de mi padre. Eso provocó que tuviese una erección bestial que no bajaba con nada, con lo que como último recurso le debí solicitar ayuda a mi madrastra, la que sin parar de leer la gaceta del corazón que leía se subió la falda, se separó un tanto el tanguita y dejó que se la metiese hasta correrme en su cara de loba para poder ver si de este modo resolvía la fuerte erección que tenía.