Añadido: 4 años hace
Esta inocente joven fue la única estudiante que suspendió el examen sorpresa, con lo que debió acudir esa tarde en solitario para recobrar la labor que había suspendido. A la joven no se le ocurrió otra cosa que llegar tarde, con lo que el maestro debió castigarla con sexo intenso. La puso contra la pared con los brazos abiertos y tras meterle mano y de comerle el coño, se la folló lo más fuerte que pudo sobre su mesa.