Añadido: 4 años hace
Piper Perri estaba inquieta, era su primer día de trabajo y deseaba ocasionar buena impresión tanto a sus nuevos compañeros como a su jefe. Llegó puntual a la oficina y la primera cosa que hizo fue dirigirse al despacho de la jefe para presentarse y darle los buenos días. Tras una breve charla la jefe supo que Piper Perri era una conocida pornostars, con lo que cerró la puerta y las ventanas de su despacho y le dio la bienvenida a la compañía con una follada lésbica de lo más salvaje. Se pasaron horas comiéndose el coño mutuamente por todo el despacho, besándose y teniendo clímax sin parar.